Omega-3, omega-6 y omega-9 son todos ácidos grasos, pero se diferencian en su estructura y en cómo están presentes en los alimentos. El omega-3 se encuentra principalmente en pescados y algas, el omega-6 en aceites vegetales como el de girasol, y el omega-9, por ejemplo, en el aceite de oliva. En la mayoría de las dietas occidentales, el omega-6 suele estar presente en abundancia, mientras que el omega-3 es menos común.

Omega-3 es un nombre colectivo para un grupo de ácidos grasos poliinsaturados. Las formas más conocidas son EPA (ácido eicosapentaenoico) y DHA (ácido docosahexaenoico). Estas sustancias se encuentran de forma natural en pescados grasos, como anchoas, sardinas y caballa.

El aceite de algas es una alternativa vegetal al aceite de pescado, rico de forma natural en DHA y EPA y producido a partir de microalgas cultivadas de manera sostenible.

Sí, se recomienda tomar el complemento con una comida, ya que las sustancias liposolubles se absorben mejor junto con los alimentos.